(Sé consiente q esto no es una poesía de amor, es para ti)
Con el corazón rasgado y las venas fundidas
La sangre no es sangre la llevo la homicida...
Un cuerpo más muerto con ojos que miran
Vaga por Madrid en silencio sus días.
Sus pasos sin ruido
Sus ganas de nada
Dejan olor a flor
A flor marchitada
Se esconde de la luz
Por que la sombra le juzga
No entiende que es su cruz
La traición que le turba
Le teme al reflejo que le habla cada instante
Le teme por que dice el nombre que no quiere
Ese que buscaba su boca antes
Que se le caigan los sentidos primero, prefiere
Su amor sonaba cual violín o guitarra
De su amor solo queda el silencio
De seis cuerdas rasgadas
Tirado, roto, maltratado, quedo el instrumento
¡Tan tarara tan ta!
Roleto