lunes, 30 de noviembre de 2009

La Madrugada, El Jardinero y La Azucena

Son rosas violetas las que florece el alba
Son flores marchitas lo que ella recoge
Son lagrimas mías que riegan las almas
Es cosecha de amores lo que el jardinero pone

La buena azucena no tiene quien la mire
Por que el jardinero observa hacia otro lado
La buena azucena en silencio reprime
El frío que siente su corazón helado

La linda madrugada de unos ojos aparece
Y el jardinero se alienta a su llegada
Una triste niña azucena se muere y anochece
Su ilusión que antes decía que la amaba

La cosecha de amores no pierde ni gana
El jardinero subsiste tan bien como puede
La niña azucena de olvido se opaca lejana
Mendigando calor que la descongele

Con verdad y cariño le dijo lo que era
El jardinero no quiso nunca hacerle daño
La niña de ojos tristes caminó hacia la puerta
Pagando justicia de jardineros de antaño

Así se labora en la tierra árida del amor y el desconsuelo
Se ven en las cosechas plantar los tristes jardineros
Flores que las madrugadas se cuelgan en el pelo
Pero llega el frío y todo cambia, hasta que se aleje otra vez enero.

Roleto

1 comentario:

  1. Estas Muy enamorado eso se nota. Felicidades, aunque a veces es mejor decir la verdad y no callar, el silencio duele más que un simple "LO SIENTO".

    Puedes huir, puedes callar, pero nunca podrás olvidar que lastimaste un corazón Inocente el cual su único pecado fue enamorarse de quien no debía.

    “”No trates de robarme el presente es todo lo que poseo””

    Borralo.

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